Manteniendo la salud en los años dorados de tu mascota.

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15-09-2014

Manteniendo la salud en los años dorados de tu mascota.

Cuando tienes una mascota ya mayor, lo más importante que debes recordar es esto: Morir no es opcional, pero el sufrir sí.

En otras palabras, no asumas que una mascota geriatra o enferma no pueda disfrutar muchas semanas, meses o años de una vida libre de dolor, feliz y cómoda. Y tu veterinario te puede ayudar a que esto sea posible, volviendo los años dorados de tu mascota una experiencia inigualable para ti y para ella.

Empieza con una visita al veterinario.
Para que tu mascota disfrute de una alta calidad de vida, necesitas asegurarte de que los problemas de salud que tenga puedan ser atendidos. Esto empieza con una revisión completa, que incluye diagnóstico básico y pruebas.
Este tipo de revisiones, que checan desde la punta de la nariz hasta la punta de la cola, debe incluir una revisión dental y evaluaciones cuidadosas de todas las pruebas para verificar que no haya problemas en órganos vitales, como los riñones.

Después de la revisión –que las mascotas geriatras deben tener dos veces al año-, tú y tu veterinario revisen los resultados para plantear estrategias y priorizar el cuidado.
En muchos casos de mascotas mayores, tras años de un mantenimiento inadecuado tratándose de higiene dental hay problemas con dientes rotos, medio podridos y encías infectadas.
Estas mascotas sufren de dolor constante y muchas veces no comen bien por lo mismo.

Este tipo de urgencias deben atenderse a la brevedad y te sorprenderá lo feliz que tu mascota estará una vez que se solucionen.

Seguimiento y Cuidado en casa.
Ya que los problemas de salud más urgentes han sido solucionados, tú y tu veterinario pueden trabajar en un plan de cuidados y mantenimiento, la mayor parte del cual podrás darlo fácilmente tú en tu hogar.

*El manejo del dolor es esencial.
Las mascotas geriatras, como los adultos mayores, suelen lidiar con dolor relacionado o similar a la artritis.
Hay cambios que puedes hacer fácilmente -como poner cajas de arena en cada piso de la casa, proporcionar camas más blandas, hasta escaleras especiales para poder subirse a las camas o muebles-, pero el impacto mayor vendrá por cambios médicos y en su vida del día a día.
Si tu mascota está gordita, debes bajarla de peso para aliviar la presión de las articulaciones; una dieta adecuada monitoreada por el veterinario junto con suplementos como glucosamina y omega tres en complemento con alguna medicina recetada por tu veterinario para aliviar el dolor articular pueden lograr una mejor salud en poco tiempo.

*No dejes de vigilar la ingesta de fluidos.
Muchas mascotas mayores tienen problemas de deshidratación debido a que les es doloroso moverse hasta el plato con agua. Tanto el tratamiento contra el dolor como el hacerles más accesible su agua puede ayudar; un plato tipo fuente puede resultar más atractivo –para que se anime a beber- y le costará menos trabajo llegar al agua.

También pueden diagnosticarle a tu peludo un cambio de dieta, de croquetas a comida enlatada, que contiene más agua. Para las mascotas geriatras, sobretodo gatos, el conseguir que aumente la ingesta de agua ayudará enormemente a los riñones.

*El cuidado dental debe de ser diario.
Ya que tu veterinario ha solucionado el problema que provoca el dolor en el hocico de tu mascota, asegúrate de mantener la higiene oral diariamente. Aunque lo más usual es el lavado de dientes con cepillo, pregunta a tu veterinario sobre otras opciones, ya sea en enjuagues o en masticables.

Nos toca no dar por hecho cada día que nuestro peludo pasa con nosotros y eso incluye asegurarnos que ése tiempo sea de calidad. Tu veterinario seguramente estará en la mejor disposición de ayudarte.