Buscar:
Gatos PREGUNTA, INFÓRMATE, OBSERVA 15-02-2015
Nueve maneras de saber si tu gato está sufriendo algún dolor.

Uno de los momentos que como dueños de mascota tememos es el que enferme.  Y es que no nos pueden decir “me duele aquí”.  Es desesperante no saber qué tanto dolor tiene; hasta personas que han convivido con gatos toda su vida tienen dificultades para saberlo y muchas veces se sienten culpables porque piensan que “deberían”  notar cuando algo va mal. 

Un gato enfermo presenta “síntomas” aunque sutiles. Te damos algunos tips a los que puedas estar atento:



1.Cambio de comportamiento.
Si un gato muy activo empieza a pasar la mayor parte de su día durmiendo, puede ser una señal de que algo le duele. Del mismo modo, si un gato de repente se pone gruñón, no es porque “está haciéndose viejo”. También puede presentarse un comportamiento contrario y el gato puede volverse hiperactivo.

2.No quiere que lo toquen y quiere que lo dejen en paz.
Si tu gato empieza a gruñir, lanzar arañazos o silbar cuando lo acaricias, tocas o mueves, es señal de que algo lo está haciendo sentir incómodo.

3.Dormir sólo en una posición.
Un gato artrítico, por ejemplo, puede encontrar más alivio durmiendo de un lado (el izquierdo de su cuerpo, por ejemplo) que del otro debido al dolor.



4.Se esconde.
Como son cazadores, un gato sabe por instinto que el dolor los hace vulnerables a otros depredadores, de modo que se esconderá para permanecer seguro.

5.Se lame excesivamente un área en particular.
Un gato que siente algún dolor tratará de aliviarlo lamiendo el área que le duele. Se ve este comportamiento con frecuencia en gatos que padecen de infecciones renales o cistitis. En este caso, es común que el gato se lama el vientre hasta dejarse sin pelo.

6.No se acicala.
En su mayoría, los gatos geriatras no se ven tan “limpios” debido a que enfermedades como la artritis u otras enfermedades hagan que el estirarse para acicalarse se vuelva algo doloroso. Cualquier gato que deje de acicalarse debe ser llevado inmediatamente al veterinario.

7.Posiciones físicas anormales.
Un gato sufriendo un dolor severo puede sentarse encorvado, con las patas delanteras bajo su cuerpo y la nariz casi tocando el piso; hay otras posiciones anormales que pueden no ser tan obvias.

8.Mirada lejana.
Esto, combinado con la posición anormal hace más obvio el dolor del gato. Algunos dueños de gato mencionan esta combinación de actitudes/posiciones en los últimos días de vida del gato.

9.Cambios en sus hábitos de higiene (caja de arena).
Los gatos que sientan dolor articular o de cadera pueden tener problemas para usar la caja de arena como lo hacían. Mantener la posición adecuada para orinar o defecar puede ser doloroso para un gato con  dolor en las rodillas o cadera.

En general, los cambios de conducta, aunque sutiles muchas veces, pueden ser un mensaje de que algo no va bien. Está atento y no dudes ir con tu veterinario ante cualquier asomo de preocupación. Más vale que te digan que no es nada.

Fuente: JaneA Kelley, para petsmagazine.com.sg

Artículos relacionados:
Consejos BiMa Av. Uxmal 173-6  Col. Narvarte Poniente, México  Distrito Federal C.P. 03020, Delegación Benito Juárez, Teléfono: 6391-7062
Todos los derechos de las imágenes aquí presentadas pertenecen a su respectivos dueños.